Cuantas promesas se van con el tiempo, hoy yo me ahogo en un mar de recuerdos. Yo construía un castillo de sueños que pronto se derrumbó. Cuando te vi en aquel bosque encantado, un duende dijo que tu eras mi príncipe azul. Como si fuera por arte de magia, llenaste mis días de luz.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario